Hay sorpresas que resultan muy desagradables, especialmente, si cambian nuestros planes iniciales y nos llevan a hacer cosas que no nos gustan. Pero, desgraciadamente, a veces son inevitables y no podemos hacer nada para evitarlas.

Un buen ejemplo de este tipo de situación puede ser recibir la visita de una amistad en tu casa. No te ha llamado, no te ha avisado con antelación, y de repente, aparece por tu puerta. Sin embargo, por muy buena relación que mantengas con esta persona, puede que el hecho de que vaya a pasar unos días en tu hogar no te haga ninguna gracia.

No te preocupes, no es nada raro. Hay personas que aprecian mucho su intimidad y no les hace gracia compartirla con otra gente. Si ésta es tú posición, hay una serie de consejos que te pueden ayudar.

-Paciencia y mucha. Parece lógico, pero es que es muy necesario tener paciencia y pensar muy bien lo que dices antes de hablar, sino quieres estropear la relación con esta persona.

-Piensa que el tiempo que va a estar es temporal. Lo más frecuente es que venga a pasar unos determinados días contigo, por lo que piensa que es una situación temporal y que se pasa antes de lo que parece.

-Desahógate vía whatsapp, Tener a un confidente con el que desahogarte es clave para aguantar estos días.

-Haz saber que tú vida está muy ocupada. Si no quieres que esta persona vuelva a aparecer por un tiempo amplio, quéjate de las múltiples cosas que vas a tener que hacer durante los siguientes meses y del poco tiempo que vas a tener.

-Recrea tu propio mundo. Aunque estés conviviendo con otra persona, puedes tener tus propios espacios y momentos de intimidad. Disfrútalos y no dudes en hacer uso de ellos.