Una investigación llevada a cabo por científicos del King College de Londres ha revelado los beneficios que presenta tener un buen descanso.

Para ello, han contado con la participación de 42 personas, que fueron divididas en dos grupos. Uno de ellos durmieron una hora y medio más cada noche, mientras que el otro tuvo que mantener sus propios hábitos de sueño.

Asimismo, durante el período estudiado, los participantes registraron todo lo que comieron.

Los resultados revelaron que la voluntad de consumir azúcar fue menor en el grupo de personas que pasó a dormir más. Más concretamente, se registraron, de promedio, 10 gramos menos de azúcar en la dieta de este grupo en relación a las personas que mantuvieron sus hábitos de sueño.

A pesar de que la cantidad de participantes de esta investigación fue pequeña, estos resultados fortalecen el vínculo entre el poco tiempo durmiendo y la baja calidad de las dietas, que ya se ha podido observar en otros estudios. Aunque todavía es necesario que haya más investigación para poder demostrar esa conexión.

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