¿Qué pasa si juntas a un creador de artículos de terror y a un panadero? Pues éste es el resultado: pasteles terroríficos de maría que no dejarán indiferente a nadie.
De esta manera, el diseñador de accesorios de terror Ashley Newman y el panadero estadounidense Andrew Fuller han otorgado un nuevo giro a la horrible historia de Sweeny Todd, el barbero victoriano que convertía a sus víctimas asesinadas en pasteles.
Según informa DesignBoom, todo comenzó con la moda de los diseños de Newman de tartas no comestibles en forma de rostros humanos cocidos hechos de látex, de los cuales Fuller recibió toneladas de solicitudes antes de decidirse a probar hacerlos con sus propias manos, aunque, eso sí, usando ingredientes comestibles.
Newman, el creador de los pastelitos de cara tipo zombie, consigue obtener la apariencia realista de los rostros estirando el látex del tono de la piel sobre una base de espuma y decorándolo con lenguas y dientes torcidos.
Aunque las piezas de Fuller son un poco menos auténticas, presentan huellas de asesinatos, costuras en la frente y sangre saliendo de la boca y los ojos para compensar.
Pero, no solo hace pasteles, sino empanadas y prótesis dentales. ¿Qué opción te gusta más para regalar a tu familia política?
En otras noticias, llega el tacro, el taco con croissant, al mundo del postureo y la gastronomía.