El perro es el mejor amigo del hombre. Seguro que has escuchado en más de una ocasión esta frase, pero quizás no has conocido una situación que te haya hecho reflexionar sobre ella. Si éste es tu caso, sigue leyendo.

Un chihuahua en el estado de Nueva York está demostrando su gran lealtad, negándose a marcharse de la tumba de su anterior dueña fallecida durante el pasado mes de septiembre.

La mascota, que ahora vive con la nieta de su anterior dueña, llegó, incluso, a colarse en el hospital donde su cuidadora de 86 años estaba siendo tratada por insuficiencia cardíaca congestiva.

Actualmente, a pesar de que han pasado cuatro meses desde su muerte, el perro continúa yendo directamente a la tumba de su antigua dueña. Una historia sorprendente.

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Sin embargo, ésta no es la primera vez que un perro muestra lealtad a su dueño más allá de la muerte.

Puesto que, en 2011, tras la muerte del un militar, su perro Hawkeye fue fotografiado junto a su ataúd, donde permaneció durante todo su funeral.