Lucho está batiendo, gracias al talento y el esfuerzo, todos los récords de precocidad en la música urbana latina. Ha sido el artista más joven en cantar en los prestigiosos Lollapalooza y Buenos Aires Trap, ha participado tres veces en el Luna Park, fue invitado ni más ni menos que por Bad Bunny para cantar en su concierto y acumula 1 millón de seguidores en Instagram y 600.000 en Youtube. Y por si eso fuese poco fue parte de “Tumbando el club”, canción que se ha convertido en el himno de toda una generación en Argentina y que cuenta con 150 millones de reproducciones, donde comparte protagonismo con Neo Pistea, C.R.O, Obiewanshot, Ysy A, Cazzu, Khea, Coqeéin Montana, Marcianos Crew y Duki. Una muestra más de que Lucho, con apenas 17 años, es considerado la gran esperanza de la música urbana argentina.
Lucho ya ha dejado de ser una promesa y se ha convertido en una realidad, en el presente. Dejó apartado el freestyle y las batallas de gallos para cumplir su sueño, grabar un álbum, y ya lo ha logrado. Un elepé de doce canciones producido por Bles y Asan, en donde además de su gran valedor Duki, colaboran Neo Pistea, Khea, Diego Yd, Midel y Lil Troca. Dos años después de que debutase con el EP “Sangre Joven” Lucho regresa con su gran obra maestra bajo el brazo, el primer capítulo de una larga historia que sólo acaba de empezar.
