Enfrentarnos a una ruptura sentimental es un tema complejo y su superación requiere tiempo y una buena gestión de las emociones. Sentimientos como la tristeza, la decepción, el miedo o la frustración son comunes y completamente normales puesto que supone poner un punto y final a una etapa de nuestra vida para comenzar otra. Si te encuentras en este proceso, a continuación te ofrecemos una serie de consejos que pueden ayudar a superar una ruptura o separación.
En el caso de que la ruptura implique un divorcio es probable que necesites orientación y asistencia legal. Más aún en supuestos en los que la separación no se produzca de forma cordial y amistosa. Si ambos miembros de la pareja tomáis la decisión de separar los bienes compartidos y resolver la relación jurídica existente, lo más aconsejable es llegar a un acuerdo. No obstante, esta forma de resolución no es siempre posible, por lo que será necesario que se busque ayuda profesional en la gestión de condominios.
Cortar todo el contacto
Al principio, uno de los mayores obstáculos para superar la ruptura es el mantenimiento del contacto de forma constante debido a que dificulta el proceso de adaptación a la nueva realidad. En aquellos casos en los que la finalización de la relación haya sido muy dura, compleja o dolorosa, genere ansiedad el mantenimiento del contacto o exista un alto grado de dependencia emocional, es bastante aconsejable desconectarte al completo de esa persona. Es decir, eliminar todo tipo de comunicación vía mensajería digital, evitar el contacto físico, así como revisar sus publicaciones en redes sociales. Con el objetivo de darnos el espacio necesario para sanar, llevar a cabo el conocido como contacto cero puede ser una táctica muy útil para superar este proceso.
Nueva etapa, nuevas rutinas
El fin de una relación también marca la pérdida de hábitos, planes y costumbres compartidos con la otra persona. Un hecho que provoca que nuestro día a día sea más duro de sobrellevar. En este aspecto, la introducción de nuevas rutinas como pueden ser establecer diferentes tramos horarios para nuestras tareas o apuntarse a nuevas actividades puede facilitar la adaptación a la nueva realidad.
Desahogarse con nuestras personas cercanas
Aliviar la carga emocional con nuestros seres más queridos es muy importante para sentirnos apoyados y no caer en la soledad. Poder expresar nuestras emociones a alguien que nos quiera escuchar y valide nuestros sentimientos puede marcar una gran diferencia en nuestro estado de bienestar. Asimismo, en relación a ello, es relevante no guardar excesivos recuerdos en nuestro entorno que puedan intensificar nuestro dolor al comienzo de este duelo y que nos impide avanzar.
Evitar la comparación
Por último, hay que tener presente que cada persona supera una ruptura sentimental a su ritmo. Por lo que no es saludable estar comparándonos con nuestra expareja en ningún aspecto. Revisar sus redes sociales o preguntar acerca de su estado sentimental solo puede llevar a sentir frustración o inseguridad. En conclusión, es fundamental enfocarnos en nosotros mismos y mirar hacia el futuro sin miedo y con mucha ilusión por lo que está por llegar.