Netflix, la plataforma streaming que ofrece series y películas, ha sido acusada de poner en moda el tráfico sexual tras encargar un drama italiano basado en el escándalo de prostitución adolescente de Baby Squillo.
De esta manera, el Centro Nacional de Explotación Sexual (NCOSE), con sede en Estados Unidos, ha pedido que se retire antes de su lanzamiento la ficción “Baby” compuesta por ocho capítulos.
Esta serie explora las vidas de un grupo de adolescentes de secundaria en Roma y está vagamente inspirado en una historia real, el escándalo de Baby Squillo, en el que se vio implicado el marido de la nieta de Mussolini.
En una carta a Netflix, la vicepresidenta de NCOSE, Lisa Thompson, acusó a esta plataforma de normalizar el abuso infantil y dijo que se observaban dobles raseros después de haber retirado al actor Kevin Spacey de House of Cards tras las acusaciones de agresión sexual vertidas sobre él.
“Netflix recientemente despidió a Kevin Spacey (…) Para ahora darle la vuelta al asunto y producir un espectáculo que glorifica el tráfico sexual de menores y bautizarlo como ‘entretenimiento nervioso’, es el colmo de la hipocresía”, dijo la vicepresidenta. “No hay ‘prostitutas bebé’, solo niños sexualmente abusados, explotados y violados”.
“Si los ejecutivos de Netflix se preocupan más por terminar con la explotación sexual en este momento #MeToo que por sacar provecho de los temas de explotación sexual, cancelarian la producción de este programa de forma inmediata”, agregó Thompson.
La carta fue enviada a Netflix el jueves, que fue el Día Nacional de Concientización sobre la Trata de Personas y fue cofirmado por más de 50 activistas, proveedores de servicios sociales y sobrevivientes del tráfico sexual.