El príncipe Enrique de Inglaterra y la actriz estadounidense Meghan Markle se han casado durante la mañana de este sábado en Windsor, acompañados de celebridades y casi dos mil personas del pueblo británico. Uno de los aspectos que casi todo el mundo que estaba esperando, el vestido de novia de Meghan Markle ha sido desvelado y éste ha impresionado.

Se trata de un vestido con escote de barco, cortado con un velo de tul bordado a mano de gran longitud, que no presenta costuras en el corpiño, diseño de Clare Waight Keller de Givenchy.

Según los expertos, estos vestidos limpios y sencillos son muy complicados, porque a diferencia de un vestido de encaje, no hay lugar para el error y no se pueden ocultar las arrugas.

Asimismo, lleva la tiara de la Reina María, que se usó por última vez en el siglo XIX.

Resumiendo, el vestido de Meghan se podría definir como estructural y limpio, evocando un estilo vanguardista y moderno.