Para todas aquellas personas a las que les da pereza o no tienen tiempo para ir a un mercado a comprar flores, una máquina expendedora puede ser la solución a su problema. Puesto que, pese a que ya hemos visto vendings de cualquier tipo de productos, las máquinas expendedoras de flores frescas son toda una novedad. Por el momento, han llegado al barrio londinense de Clapham y el puesto o la máquina dónde se encuentran se llama Rockflower. 

Estos puestos constan de una pantalla táctil que permitirle realizar el pedido, mientras que el sistema permite al propietario del quiosco realizar un seguimiento de las ventas y reabastecer las flores agotadas de una forma rápida. Asimismo, las flores se ofrecen en forma de ramos, pequeños racimos y plantas en macetas.

De esta manera, si quieres regalar flores a tu pareja, familiar o amigo, puedes hacerlo en cualquier momento del día, sin necesidad de buscar tiempo extra para ello.

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