Es una prenda bastante sensual, cómoda y arriesgada, que puede llegar a quedar muy bien a aquellas personas que la llevan. Hablamos del mono de trabajo, esa pieza completa con la que no tenemos que comernos la cabeza para combinar nuestro look.
Podemos llevarlo con más ropa en invierno para protegernos del frío o, sin nada luciendo parte de nuestro cuerpo en aquellos días más cálidos, lo que puede dar bastante morbo.

Prada ya nos lo enseñó en su última colección de primavera/verano, pero no era la primera vez que esta marca recurría a esta prenda, ya que pudimos verla en alguna línea anterior masculina.

Además, otras firmas low cost ya se han animado a lanzarla. O si no quieres adquiere una pieza completa, también puedes hacer una reinterpretación como la de Calvin Klein y jugar a llevar una parte inferior y una superior muy parecidas, simulando una única prenda.


Así que, si quieres probarla, ya no tienes excusa.
