En un reciente artículo publicado por Vogue Business de Rachel Čerňanský, la autora sugiere que, entre otras causas, la industria del calzado puede ser una de las culpables de los incendios forestales de la Amazonia.

Según Cernansky, la principal causa de deforestación en el Amazonas es la ganadería, junto con industrias asociadas como la producción de soja, que se utiliza como alimento para el ganado. Entonces, a medida que crece la demanda de ganado, ya sea para carne o cuero, los ganaderos queman más bosque para dejar espacio a las vacas.

Cernansky afirma que Brasil suministra “alrededor del 22% de las exportaciones mundiales de cuero, lo que lo convierte en la mayor fuente de pieles de animales, según un análisis de la Federación Nacional de Vida Silvestre de Estados Unidos. Y la industria del calzado es el mayor comprador de todo ese cuero, dice la ONU ”.

En este sentido, hay marcas como Nike, Kering y LVMH que ya se han comprometido a abastecerse solo de cuero libre de deforestación. Sin embargo, el problema es que rastrear de dónde proviene su cuero puede ser problemático. El ganado puede ser trasladado de rancho en rancho para evitar este requisito de “no deforestación”. 

Entonces, ¿cuál es la solución a este problema? Según la autora del artículo, es necesario aumentar la transparencia y lograr obtener una mejor localización del origen del cuero. Muchos servicios como Globaly Canopy’s Trase o la herramienta de evaluación responsable del cuero de Textile Exchange están surgiendo con la esperanza de proporcionar un mejor conocimiento de dónde se obtiene el cuero. Sin embargo, si hay algo que está claro es que solucionar este problema requiere la cooperación de tanto las compañías como de las instituciones políticas.

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