Los avances en medicina no consiguen evitar que las enfermedades cardíacas sigan aumentando cada día. Por lo que, se busca la incorporación de formas alternativas que permitan prevenir y tratar las enfermedades del corazón.

Sabemos que una dieta baja en sal y azúcar acompañada de la práctica de ejercicio regular puede disminuir el riesgo de padecer enfermedades del corazón. Pero, ¿podría el té rooibos ayudar también a ello?

Un estudio realizado en Suecia ha revelado que entre 30 y 60 minutos después de beber 400 ml de este té, la actividad de la enzima convertidora de angiotensina o IECA se suprime significativamente. Se cree que esta enzima está implicada en el desarrollo de la enfermedad cardíaca, y por lo tanto, los inhibidores de IECA se prescriben a menudo para tratar la hipertensión y la enfermedad cardíaca.

Las principales sustancias de este té que resultan positivas para el corazón pueden atribuirse a los antioxidantes polifenólicos que posee. El té Rooibos contiene flavonas y flavonoles tales como la quercetina que contiene grandes propiedades medicinales.

De esta manera, el té Rooibos ayuda a prevenirla enfermedad cardiovascular, al inhibir la migración de las células del músculo liso dentro de las arterias, una causa clave del estrechamiento de las arterias que pueden conducir a un ataque al corazón.